Mediante modelos predictivos, el machine learning está ayudando a miles de organizaciones a automatizar procesos y tomar decisiones informadas en tiempo real para hacer crecer sus negocios. “Se trata de ‘empezar de a uno’, con pequeños problemas y necesidades”, explica en este artículo Adriana Noreña, vicepresidenta de Google para Hispanoamérica.

Hasta hace unos cinco años, una pareja de ancianos en Japón dedicaba gran parte de su tiempo a clasificar los pepinos que producían en su huerta según su rugosidad, su suavidad y su curvatura. Esta selección, que desde hacía años se realizaba en forma manual, le llevaba a la pareja muchísimas horas del día, hasta que su hijo Makoto decidió darle un giro a la historia y usar machine learning para crear un algoritmo que fuera capaz de categorizar los pepinos y ordenarlos automáticamente. Como resultado de este cambio, la pareja de granjeros no solo goza hoy de un sistema que selecciona los pepinos tan bien como ellos lo hacían sino que, además, liberaron una valiosa cantidad de tiempo para dedicarse a lo que a ellos más les importa: producir vegetales deliciosos.

Aunque no lo parezca, esta sencilla historia ofrece importantes lecciones para los negocios de nuestra región, de todos los tamaños. En días en que el mundo es cada vez más imprevisible y el tiempo es cada vez más escaso, la automatización ha dejado de ser una oportunidad para convertirse en una necesidad urgente. Hoy, empresas e instituciones de todo el mundo enfrentan desafíos logísticos nuevos, ya que cada vez más personas compran online y esperan que los productos lleguen a donde quieren y cuando quieren.

También, están encontrando nuevos retos en la atención de sus clientes, por ejemplo, cuando se baten récords de ventas en los eventos de descuentos y las capacidades de los call centers son llevadas al límite. Y están frente a grandes desafíos de marketing: los hábitos de consumo, las necesidades y las expectativas de las personas cambian constantemente y a gran velocidad, y es prácticamente imposible seguirlos con los sistemas publicitarios tradicionales.

La automatización ha dejado de ser una oportunidad para convertirse en una necesidad urgente.

En una realidad omnicanal cada vez más consolidada, las marcas que busquen crecer necesitarán acelerar su transformación digital para ofrecer una excelente experiencia al cliente. E igual que en el caso de los granjeros japoneses, las palabras clave para resolver los nuevos desafíos son “inteligencia artificial” y “machine learning”.

Probar, aprender y mejorar

La inteligencia artificial ya venía creciendo a muy buen ritmo hasta 2020, pero los sucesos de los últimos dos años hicieron de su adopción una necesidad impostergable. Hoy, la humanidad cuenta con más información que nunca, y la inteligencia artificial está transformando el modo en que usamos esos datos. Mediante modelos predictivos, machine learning ayuda a miles de organizaciones a automatizar procesos y a tomar decisiones informadas y en tiempo real, para hacer crecer sus negocios, incluso en contextos de profunda incertidumbre como los que estamos atravesando ahora.

Para quienes quieran conquistar el futuro comenzando hoy, la automatización es la respuesta: los ayudará a ser más ágiles a la hora de innovar y, así, impulsar los objetivos comerciales de manera eficiente, acelerando su transformación digital de cara al mañana.

Los sucesos de los últimos dos años hicieron que la automatización ya no sea una opción para las empresas sino una necesidad.

No basta con automatizar, hay que general valor

Sabemos que la habilidad de monitorear, evaluar y reaccionar ante los cambios es un factor clave de diferenciación en el mercado. Por eso, las prácticas que adoptemos para automatizar los procesos de negocio tienen un impacto directo en la generación de valor para la organización.

Ser ágil no se trata solo de hacer las cosas más rápidamente, sino de producir la mayor cantidad de valor para la organización en el menor tiempo posible. Esto implica adoptar prácticas que permitan emprender iniciativas de mejora y automatización de procesos basadas en la generación de valor de forma incremental.

Si concentramos nuestros recursos en la creación de valor durante todo el ciclo de vida de la automatización, que es el camino a la transformación digital, tendremos la capacidad de implementar pequeñas mejoras para adaptarnos de forma continua a los cambios del entorno.

Adoptar principios ágiles para automatizar un proceso nos permite entender y priorizar la generación de valor. Además, nos da la capacidad de implementar todas las etapas del ciclo de vida del proceso, lo que permite obtener entregables tangibles a corto plazo con alto impacto para la organización.

Desde Brújula, estamos trabajando junto a empresas de todo el mundo para ayudarlas a encontrar las soluciones que cada una necesita. Se trata de probar, aprender y mejorar; de “empezar de a uno”, con pequeños problemas y necesidades. Estamos juntos en este camino de crecimiento y, además, contamos con la tecnología. Si la usamos con inteligencia, podemos mejorar nuestras vidas y nuestros negocios. En Brújula, estamos listos para avanzar juntos hacia la meta. ¿Te sumas?